«Si bien la competencia fue todo el día (21 de marzo) los demás días posteriores al concurso nos llevaron a conocer varios sitios turísticos de Bombay. Todos nos quedamos hasta el 25 de marzo», comenta emocionado por la gran experiencia.
Competencia de alto nivel
Terán recuerda que se enteró de esta competencia a través del
grupo de programación competitiva de su universidad, la
Universidad Nacional de Ingeniería (UNI), en donde cursa el tercer año de la carrera de Ingeniería de Sistemas. Luego de este aviso se animó a participar y, junto a varios estudiantes peruanos, lograron pasar a la siguiente fase luego de enfrentarse a más de 100,000 estudiantes universitarios a nivel mundial.
Luego de esta primera fase, Terán hace énfasis en el apoyo que les comenzó a brindar la empresa TSC, pues organizó una reunión para todos los clasificados peruanos, lo que permitió que interactúen por primera vez en persona, ya que la primera fase fue completamente virtual.
La segunda fase de la competencia, cuenta el estudiante, consistió en una prueba que duró aproximadamente seis horas, y es ahí cuando comenzó a sentir los nervios y la ansiedad con respecto a sus resultados, pues su objetivo era, y sigue siendo: ganar la competencia. Cuenta que entrenaba todos los días junto a su entrenador, el ya egresado de la UNI, Jorge Huamán.
Tres días después de participar en la fase dos, recibió la llamada de una empleada de Recursos Humanos de la empresa TCS-, felicitándolo por haber pasado a la fase final. «Entonces ya pude estar más tranquilo. Se lo comenté a mi familia y me felicitaron. Me emocioné mucho, es una alegría inmensa y bueno, ahora que se viene la fase final en la India nos veremos cara a cara con los mejores 25», declaró a la Agencia Andina.
Junto a Juan, viajaron 6 estudiantes chilenos, en total, los 7 representarán a América Latina en la final de la Codevita 2024, considerado el torneo de programación más grande del mundo.
La empresa
Tata Consultancy Services (TCS) presenta esta competencia con el objetivo de acercar y profundizar el interés de los estudiantes en la programación y darles la
oportunidad de obtener experiencia y demostrar su talento a través de prácticas de informática.
Este objetivo se ve reflejado en el indudable apoyo que brinda la compañía a los seleccionados, pues ni Juan ni los otros 24 competidores deberán preocuparse por los gastos de pasajes ni estadía en la India, ya que la empresa se hará cargo de todo. Incluso, comenta Terán, TCS ofreció la contratación de traductores en caso alguno de los jóvenes no hablase fluidamente el inglés.
¿Cómo es la competencia?
En palabras de Terán, los problemas que les son presentados en las diversas fases son problemas que se verían en el día a día. «Son problemas prácticos, en los que uno busca la manera en cómo resolver estos ejercicios. Ya sea a través de la creación de programas o algoritmos, entre otros. Estos algoritmos se aprenden investigando ya cada uno por su cuenta», señala el joven universitario.
Por ejemplo, recuerda que uno de los problemas planteados en el concurso tenía que ver con la distancia que debe viajar un avión y buscar la ruta más corta para que llegue a su destino. Para resolver este tipo de ejercicios, Juan se lleva preparando un año. «Al principio es complicado, porque empiezas a ver nuevos temas que desconoces y tienes que investigar, pero después tienes ese gusto de poder resolverlo. Tú lo ves complicado, pero cuando resuelves eso complicado, ya tienes una satisfacción contigo mismo», expresa.
Esta es la
primera vez que Juan queda en la recta final de una competencia internacional, pues participó en otras competencias, como la
Meta Hacker Cup, pero no logró superar la primera fase; sin embargo, no dejó que eso lo detuviera y continuó esforzándose.
Esta edición 2024 repartió US $20,000 en premios, además de entregar el trofeo al ganador. Junto a todo esto, brindó también ofertas de empleo y oportunidades de intercambio a los primeros puestos.
Por último, Juan deja un mensaje a todos aquellos programadores, ingenieros o jóvenes interesados en las áreas STEM: «Si ven una competencia, un reto, deben intentarlo, porque se van a arrepentir si no lo hacen. Realizar el reto te va a dar experiencias que luego podrán servirte para enfrentar otros más», concluye.
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