Para empezar, un remate judicial es una modalidad para la adquisición de muebles, inmuebles y otros bienes que han sido sujetos a un procedimiento legal. Y como hay un incumplimiento de pago por parte de un deudor, un juez ordenó su venta pública.
Según el portal jurídico LP, los remates judiciales se realizan de forma virtual porque se busca que sean más transparentes y seguros, considerando que cuando se realizaban de manera presencial surgían casos de amedrentamiento hacia los compradores por parte de los dueños originales y otros actos de corrupción entre los participantes.
Ahora la virtualidad ha permitido reducir esos problemas porque solo el personal necesario conoce la identidad de los postores involucrados.
También se quiere que los remates judiciales sean más accesibles y tengan una mayor difusión entre el público que no siempre puede acudir a un acto de presencial por temas laborales.
¿Dónde se realizan los remates judiciales?
Todo se realiza a través del sistema de
Remate Electrónico Judicial (Remaju), creado por el Poder Judicial, al cual se puede acceder vía la página web:
remaju.pj.gob.pe/remaju/
En dicho portal se puede observar las propiedades que están siendo subastadas y puestas en remate, además de ver el registro del inmueble, la declaración del postor ganador, el registro de postores, la asignación de la sala virtual de remate y los resultados finales del proceso.
Los remates judiciales también se publican en el diario oficial El Peruano y otros diarios de mayor circulación, además de la página web de Remaju, donde las personas tienen que registrarse.
¿Cómo registrarse en Remaju?
El portal jurídico LP explica cómo se puede participar en los remates judiciales, y lo primero es el registro en Remaju, para lo cual se deben seguir los siguientes pasos:
1. Ingresar a la página web de Remaju haciendo click
AQUÍ.
2. Para acceder como persona natural o jurídica debes tener una casilla electrónica, el cual puedes obtenerlo a través del aplicativo del Sistema de Notificaciones Electrónica (SINOE).
3. En SINOE tendremos que presionar en el enlace Solicitar registro de casilla, donde veremos seis opciones, pero nos interesa registrarnos en Remaju online, por lo que tendremos que hacer clic en el apartado de Remate Electrónico Judicial.
4. Luego veremos dos opciones, personas naturales y personas jurídicas. En esta ocasión haremos click en personas naturales, donde tendremos que colocar nuestros datos: nombres, apellidos, DNI, teléfono, celular, correo electrónico y dirección de domicilio. Con esto contarás con una cuenta que te permita participar en los remates judiciales.
Proceso de los remates judiciales
Una vez registrado, en la página web de Remaju encontrarás una lista de todos los remates judiciales disponibles y para participar en uno se debe depositar el 10% del valor de la tasación del bien en el Banco de la Nación, y si no te adjudicas el bien, el dinero se te devuelve de manera inmediata.
El portal jurídico LP señala que hay dos formas de realizar los remates judiciales y esto se te informará en la página web de Remaju cuando hagas presente el voucher del Banco de la Nación.
Lo tradicional es con una puja que dura 24 horas, allí uno va haciendo sus ofertas y gana siempre la mejor oferta dentro de toda la jornada. La otra forma es con un martilleo de horario fijo, donde el remate se realiza solo en un período limitado de tiempo.
Una vez que se declara al ganador, este debe pagar el valor total del inmueble dentro de los tres días siguientes. Cuando el depósito del dinero está listo se informa al juzgado y emite una resolución que lo declara como propietario del inmueble.
Además, se emite unos partes para Registros Públicos con el fin de que el inmueble se inscriba al nombre del ganador. Con eso se levantan todos los gravámenes, y se limpia de todo proceso judicial.
La gran ventaja es que todos los inmuebles siempre se compran a menor precio y sin perder ninguna de las garantías. En este proceso no hay riesgo de ventas fraudulentas porque se le está comprando al Estado, pero es importante saber que se debe tener liquidez (dinero disponible y en efectivo).
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